Cambios Mamá Segundo Trimestre

Segundo Trimestre

Durante el segundo trimestre del embarazo, puede que experimentes cambios físicos, incluidos los siguientes:

  • Crecimiento del vientre
  • Contracciones de Braxton Hicks. Puede que sientas unas contracciones leves e irregulares, como una ligera opresión en el abdomen. Es más probable que se manifiesten por la tarde o por la noche, o después de que hagas actividad física o tengas relaciones sexuales.
  • Por esta razón, podrías notar que te aparecen manchas marrones en la cara (melasma). También puedes ver una línea oscura en el abdomen.
  • Debido al embarazo, las encías pueden tornarse más sensibles al uso del hilo dental y al cepillado, lo que provoca un leve sangrado.
  • El embarazo provoca cambios en la circulación que pueden darte mareos.
  • Los calambres en las piernas son comunes a medida que avanza el embarazo y suelen presentarse durante la noche.
  • Podrías notar una secreción vaginal pegajosa, transparente o blanca, lo cual es normal.
  • Infecciones de las vías urinarias Estas infecciones son comunes durante el embarazo.

Cambios en la mamá semana por semana

Semana 14

Es tiempo de compartir la noticia. En esta semana se inicia el segundo trimestre de gestación.

El principal cambio que experimenta la madre en la semana 14 de embarazo es el crecimiento del abdomen. Los pechos, siguen aumentado de tamaño y estarán mucho más sensibles. Por ello, es importante que la mujer comience a usar sujetadores de embarazada, sin aros y con tejidos naturales que transpiren bien.

Las secreciones como el flujo vaginal, el sudor o la saliva suelen ser más abundantes que antes del embarazo.
Es posible que la mujer experimente sangrado de las encías y de la nariz. Esto se debe a la dilatación de los vasos sanguíneos. La rinitis gravídica también es algo común. Esto es una sensación de taponamiento de la nariz similar a lo que sucede en el resfriado, pero que se debe igualmente a los cambios en la circulación y al aumento de flujo sanguíneo.

Semana 15

El bebé sigue su desarrollo de forma muy rápida y, en caso de hacerse una ecografía en la semana 15 de embarazo, podría saberse si es niño o niña.

Puede aparecer una línea marrón que va desde el ombligo hasta el pubis, la denominada línea alba. Esta línea se crea por un aumento en la producción de melanina (pigmento de la piel) debido a los altos niveles de estrógenos.

Los pezones, lunares, pecas y marcas de nacimiento también se oscurecen por la activación de las células productoras de melanina de la piel. La piel está más sensible y pueden aparecer manchas. Esto es lo que se conoce como cloasma gravídico.

La nariz puede seguir estando tapada debido a la inflamación de la capa mucosa de las fosas nasales, que responden al aumento de los estrógenos. La circulación sanguínea y el exceso de peso sobre las piernas pueden provocar la aparición de las primeras venas varicosas o varices.

Semana 16

El útero ya ha alcanzado un tamaño considerable y los vasos sanguíneos resultan comprimidos, por lo que la mujer puede sentir los pies hinchados, cansancio en las piernas, aparición de varices, etc.

Se puede empezar a notar ciertos movimientos del bebé, aunque lo habitual es hacerlo unas semanas después (alrededor de la semana 18 de gestación).

Calambres nocturnos debido a contracciones involuntarias del bebé.

Estreñimiento por la combinación de las hormonas del embarazo y la presión del útero con los intestinos.

Aumento del volumen y de la sensibilidad de los senos.

Aumento del apetito, ya que el bebé está más desarrollado y requiere un mayor aporte de energía.

Aparición de caries y sangrados de encías por un déficit de vitaminas.

Dolores de espalda debido al volumen del abdomen.

Aumento de la salivación en relación a los elevados niveles de estrógenos.

Semana 17

Durante la semana 17 de gestación, cambia la cintura de la embarazada, se suele ensanchar porque la parte baja del abdomen ha aumentado de tamaño. Es buen momento para que empieces a utilizar pantalones de embarazada, aunque te queden todavía un poco anchos, irás más cómoda.

Los calambres pueden llegar a ser muy molestos, incluso despertarte mientras estás durmiendo.

En ese momento, notarás el desarrollo de tus pechos que ya se preparan para producir leche.

Semana 18

Es frecuente que en este momento orines con más frecuencia, incluso que tengas que levantarte por la noche para ir al baño, esto se debe a que el útero está comprimido sobre la vejiga.

También es probable que padezcas estreñimiento, se debe al aumento del tamaño del útero, comprime el intestino y dificulta el tránsito intestinal, la digestión es lenta y pesada. El estreñimiento además, puede favorecer la aparición de hemorroides que están relacionadas con el aumento de presión en las venas rectales. Es habitual tener más apetito, ya que los requerimientos del bebé y la placenta son mayores.

Semana 19

¡Casi has llegado a la mitad del embarazo!

Durante el embarazo el corazón de la madre debe realizar un esfuerzo extra para que la circulación sanguínea llegue a la madre, la placenta y el feto. Puede que debido a este aumento del flujo sanguíneo aparezcan palpitaciones y anemia durante el embarazo.

Semana 20

En esta semana 20, has llegado a la mitad de tu embarazo, ya que se calcula que hacia la semana 40 es cuando está programada la fecha del parto. Debes haber aumentado alrededor de 5Kg, a partir de ahora aumentarás cerca de medio kilo por semana.

El útero ha crecido y está a la altura del ombligo. El aumento de peso junto con la circulación sanguínea hace que sientas muy pesadas las piernas, produciendo la aparición de varices. Es recomendable que descanses las piernas de forma regular, además utiliza ropa cómoda no ajustada.

Es habitual sentirse cansada y con mucho sueño. Debido al aumento del volumen sanguíneo y el mayor tamaño del útero, puede ser que aparezcan palpitaciones, sofocos o mareos.

Semana 21

En esta semana, también puede notarse la aparición de estrías en el abdomen, nalgas, muslos, caderas y pechos;  también puede ocurrir que el ombligo se salga hacia afuera debido a la presión que ejerce el útero en crecimiento sobre el ombligo.

Es frecuente que aparezca cierto grado de rigidez muscular en la columna lumbar, por el aumento de peso y volumen.

Semana 22

Durante esta semana puede que sientas molestias en la zona del bajo vientre y el pubis. Esto se debe al crecimiento uterino, que en este momento ya sobrepasa el ombligo.

Se pueden formar arañas vasculares que se generan por elevados valores de estrógeno y normalmente desaparecen tras el parto. Persisten las estrías. Puedes evitar o disminuir su aparición manteniendo la piel bien hidratada.

Puede que durante la noche te hayas despertado alguna vez por un fuerte calambre en las piernas. La curvatura de la columna vertebral cambia durante la gestación. Por esta desviación, se comprime el nervio que va a las piernas, lo que desencadena esos incómodos calambres.

Los tobillos y muñecas pueden hincharse, sobre todo al final del día, debido a la compresión de las venas por el útero que dificultan el reflujo venoso y a los cambios hormonales del embarazo. Esto puede ocasionar gran pesadez de piernas e incluso hormigueo en pies y manos. Es conveniente estirar las piernas cuando se está sentada y hacer movimientos con los pies hacia arriba y abajo o en círculo para favorecer el retorno venoso.

Semana 23

Aumenta la presión sanguínea y el incremento de tamaño del útero presiona las venas que retornan la circulación sanguínea desde las piernas al corazón, produciendo hinchazón en tobillos y rodillas, también estas zonas son propensas a la retención de líquidos. Para que la circulación sanguínea fluya lo mejor posible debes descansar tumbada sobre tu costado izquierdo, nunca boca arriba.

La piel del abdomen pica, debido a la tirantez que se produce por el crecimiento de la barriga; es importante hidratar bien la zona con cremas hidratantes para disminuir las molestias y la aparición de estrías. Es frecuente el dolor de espalda

Semana 24

La anemia es frecuente durante el embarazo y, sobre todo, a partir del segundo trimestre. Los síntomas de la anemia son el mareo, el cansancio

Semana 25

Una de las molestias más repetidas, es el reflujo, se debe a que por el aumento de tamaño del útero se comprime el estómago, esto acompañado de un incremento de progesterona producen los molestos ardores de estómago.

Otros síntomas comunes son el aumento de gases, tanto por la ralentización del tránsito intestinal como por la compresión del intestino. Por esto se recomienda a las embarazadas evitar la ingesta de comidas pesadas, evitar bebidas con gas y descansar tras la comida sentada, no recostada, evitar comer dos horas antes acostarse

Semana 26

En este período es normal que sientas ganas de orinar frecuentemente, pero después orines muy poco, esto se debe a que ha aumentado al tamaño del bebé, por lo tanto, el útero también ha crecido y presiona la vejiga, esta presión puedes confundirla con deseos de orinar, siempre que tengas ganas debes ir al baño, no intentes aguantarte.

Los movimientos fetales serán ya muy evidentes e incluso pueden ser molestos en algunas ocasiones. Puede que el feto responda estirando las extremidades si la embarazada se pone en alguna posición incómoda para el.

Semana 27

Se mantienen las  contracciones uterinas fisiológicas, que van preparando el útero para el momento del parto. Habitualmente la gestante las nota como un endurecimiento del abdomen.

Semana 28

En este momento, el embarazo está bastante avanzado, por lo que el útero ocupa gran parte del vientre, el aparato digestivo está un poco comprimido por lo que es recomendable comer poca cantidad varias veces al día.

Es frecuente el insomnio, tanto por los cambios hormonales que se van produciendo a lo largo del embarazo como por los movimientos fetales, cada vez más presentes.

Fuentes:
 https://www.mayoclinic.org/es-es/healthy-lifestyle/pregnancy-week-by-week/in-depth/pregnancy/art-20047732